domingo, 1 de septiembre de 2013

10 TIPS QUE TE HARAN SER MÁS CREATIVO





No hace muchos años los psicólogos pensábamos que el creativo nacía y que las demás teníamos que conformarnos con imitar. Muchas veces pensamos en la creatividad como algo que viene de fábrica, que los creativos nacen con un don especial. Esto no es cierto, hoy en día tenemos la certeza que el cerebro tiene la capacidad para seguir aprendiendo, imaginando y creando hasta nuestros últimos días. Te invito a tener en cuenta estás 10 ideas que te harán ser más creativo.

1. Las ideas creativas aparecen principalmente cuando estamos relajados y tranquilos. Cuanto menos ruido haya en nuestro pensamiento, cuanta más atención y más disfrutemos, más probabilidad de que aparezca una idea creativa. Las distracciones matan la creatividad, procura tener a los largo de la semana momentos de paz.

2. Para recuperar nuestra creatividad perdida debemos convertirnos de nuevo en niños. El  pensamiento productivo se dará  cuando seamos ingenuos y flexibles. Pensamiento líquido es una característica de la infancia, mezclar conceptos en un mismo espacio mental.

3. Estudios científicos han demostrado que la multiplicidad de perspectivas genera el desarrollo de la creatividad.

4. Un ejercicio práctico para generar ideas creativas es anotar durante la semana en fichas, bloc o móvil, todos los pensamiento inusuales que surjan en nuestra mente, sin juzgarlos, ni interpretarlos.

5. Aquellas personas que tienen más ideas creativas, son personas más conscientes de sí mismas, de sus experiencias, se autoanalizan con el fin de mejorar, en definitiva tiene una inteligencia emocional eficiente.

6. Una característica común de los creativos, es que tienen cierta capacidad para tolerar la ambigüedad, la disonancia y la inconsistencia. Necesitamos desestructurar nuestra imaginación para explorar fuera de los límites de los conceptos que ya tenemos incorporados en distintas categoría. “Mezclar cubitos de hielo y derretirlos juntos”.

7.  Tu creatividad mejorará si experimentas el mundo con nuevos ojos. Si haces lo que siempre hiciste, conseguirás lo de siempre. Ve a lugares diferentes, déjate llevar por olores y gustos diferentes. Escucha música diferente. La curiosidad de permitirá ser más creativos.

8. El creativo tiene que estar dispuestos a asumir riesgos y cometer errores.

9. La comodidad es enemiga de la creatividad. Cuando eliges la comodidad, la pereza, estas eligiendo ser menos eficiente en tu vida. El trabajo duro es esencial para la creatividad, la inspiración es sólo para unos pocos escogidos, los demás tenemos que esforzarnos.

10. La intuición desencadena ideas creativas. Trata de adivinar cómo va a resultar una situación, antes de analizarla con profundidad. El análisis exhaustivo y obsesivo es negativo para la creatividad,  a veces nos enroscamos excesivamente en nuestros pensamientos y nos bloqueamos.

Francisco J. Arroyo Ortega
Psicólogo escolar y forense.




domingo, 21 de julio de 2013

¿Cómo fortalecer una mentalidad positiva en nuestros hijos?



¿Cómo hago para que mi hijo crea en sí mismo? ¿Cómo hago para que enfrente la vida positivamente? Como ya vimos en un blog anterior lo primero es que nosotros, sus padres, aprendamos a ver lo positivo en ellos más que destacar sus errores. Ese es el primer paso para una mentalidad positiva. Pero hoy veamos otras herramientas adicionales.
Nuestros hijos cuando nacen, no tienen ningún tipo de mentalidad definida, nadie “nace siendo negativo”. Desde el primer día cada ser humano comienza vivir experiencias y a asociar a esas experiencias a emociones positivas o negativas, por ejemplo: La primera vez que meto los dedos al enchufe, asocio un valor emocional negativo; por otro lado, la primera vez que recibo una felicitación, asocio una emoción positiva.
En el futuro, un estudiante desarrollará una mentalidad negativa si a lo largo de sus vidas ha acumulado muchas experiencias negativas, concluyendo y “generalizando” que su vida “es negativa”, que el colegio no es un lugar agradable, que ellos no son capaces, que nada es posible, etc.
Por este motivo, si queremos ayudar a nuestros hijos a cambiar o a fortalecer su mentalidad, debemos hablar en ese mismo “lenguaje emocional” y por lo tanto debemos ayudarlos a experimentar positivamente, el rol de los padres es hacer todo lo posible para que las experiencias de nuestros hijos sean positivas. El gran problema es que los padres utilizamos los largos y aburridos sermones “racionales” para intentar ayudar a nuestros hijos y esos simplemente no sirven. ¡Foco en las emociones! Que ellos mismos se den cuenta que son capaces y para eso deben experimentar.
¿Cómo se hace esto? Aquí algunos de mis mejores TIPS:
1.- Generar un entorno positivo: Buscar diariamente las cosas buenas de nuestros hijos, decírselas y reforzarlas. ¿Cada cuánto hacemos esto? ¿Cuándo fue la última vez que le dijimos lo orgulloso que nos sentimos de ellos? Empecemos a aplaudir sus logros y acciones positivas. Todos los campeones cometen errores, si es así, hasta éstos pueden ser interpretados positivamente.
2.- Guiarlos en vez de obligarlos: El objetivo final de todo esto es empoderar. Guiarlos para que puedan salir de ese problema por sí mismos, tienen que aprender a encontrar sus propias soluciones en vez de nosotros darles soluciones que probablemente no van a utilizar o peor aún van a catalogar como “solución de padres”. Preguntarles por ejemplo, ¿cómo piensas que podrías haber conseguido un mejor resultado? La idea es proponer ideas, no imponérselas.
3.- Entregarles estrategias académicas ganadoras: Este punto es muy importante y efectivo. En cada seminario puedo ver los resultados casi inmediatos en los estudiantes. Lo que hago es darles herramientas y técnicas de estudio divertidas y estimulantes. De esta manera se dan cuenta que pueden aprender, divertirse y finalmente obtener resultados. En el fondo, se dan cuenta que “sí pueden” y miran todo de una perspectiva distinta.
4.- Enseñar a interpretar positivamente: Una herramienta muy interesante es alterar el sentimiento del niño ayudándolo a reformular el problema. Los niños tienden a asumir que tal problema “es igual” a tal significado. Ayudémoslos a dar un significado distinto al problema. ¿Cómo? Reformulando, es decir, conversando con ellos y juntos encontrar el lado positivo de las cosas que parecen negativas, recordándoles siempre que los grandes campeones se hicieron más fuertes con sus derrotas.
5.- Escuchar y estar presentes: El gran problema de los padres es que cuando nuestros hijos se abren y comienzan a compartir, nosotros, en vez de preocuparnos de escuchar y de entender cuál es la emoción que está detrás, entramos a objetar inmediatamente con nuestra “infalible lógica”. ¿Resultado? Se corta la comunicación. Tenemos que ESCUCHAR, aunque sepamos que están en un error, dejemos que hablen.
Recuerden, nada de esto es de un día para otro, todo se logra con perseverancia.
 “El coach educacional Pablo Menichetti enseña técnicas y herramientas de aprendizaje a estudiantes de todo el mundo. Sus programas ya han ayudado a miles de escolares a lograr mejores resultados en sus estudios, aumentar la motivación y nivel confianza. Obtén su informe GRATIS “52 hábitos para estudiantes excelentes”, en http://www.aprendizajeinteligente.net

sábado, 22 de junio de 2013

MI HIJO NO ESTUDIA ¿QUÉ PUEDO HACER?




La conducta de estudio, mantenida de forma constante y en condiciones adecuadas, es el elemento primordial para conseguir un nivel de logro académico adecuado.

Destacada la ausencia de déficit intelectual o retraso en habilidades curriculares previas, el fracaso académico de un escolar puede explicarse por un método inadecuado de estudio, unas habilidades de trabajo intelectual insuficiente, unos malos hábitos, una falta de apoyo social a su esfuerzo o por unas actitudes negativas hacia el estudio.

En otras palabras: el escolar inteligente que no presenta retrasos curriculares y que suspende se debe a que NO SABE ESTUDIAR, NO ESTUDIA LO SUFICIENTE O NO ESTA MOTIVADO PARA HACERLO.

¿Qué hacer con los estudiantes que, simplemente, dedican muy poco tiempo a actividades de estudio, o que estudian únicamente en los días previos a una evaluación?

En estos casos, los diagnósticos que los padres suelen realizar consiste en afirmaciones del tipo: “es vago”, “no le gusta estudiar”, “no se concentra y se distrae con mucha facilidad”, “no tiene fuerza de voluntad”, y similares.

La mayoría de mis alumnos carecen de hábitos de estudio y, por ello, les cuesta mucho ponerse a estudiar teniendo, como tienen, otras actividades muy placenteras y tentadoras, ordenador, amigos,  juegos, móvil, televisión, etc…

En cualquier caso, planteémonos la siguiente cuestión: ¿realmente podemos pedir a los escolares que se pongan a estudiar horas después de haber permanecido en clases intensan y esperar que lo hagan con agrado…? ¡Seamos honrados con nosotros mismos par poder serlo con nuestros hijos!

Como adultos, nosotros sabemos, por experiencia, que el futuro socio-laboral se encuentra en estrecha relación con la competencia académica de los individuos, de manera que cuanta mejor sea su preparación académica, mayores y mejores oportunidades tendrán en el futuro. Sin embargo, aunque esto resulta fácil de entender a nivel verbal, no resulta tan sencillo de incorporar al funcionamiento diario de los alumnos.

En cambio, constantemente comprobamos cómo una promesa de recompensa, o una amenaza de castigo inmediatos, consiguen movilizar al individuo en la dirección pertinente para obtener lo que desea y evitar lo que le desagrada. Así pues, la Ley del Efecto: la conducta se modifica por las consecuencias inmediatas, constituye uno de los principios básicos explicativo del comportamiento humano.

En base al mismo, hemos considerado la enorme utilidad que podría tener para los alumnos que no se ponen a estudiar, un curso de técnicas de estudio junto con un programa estructurado de estudio dirigido y de entrenamiento en auto-control en el estudio.

De esta manera, el objetivo último a lograr, consiste en mejorar el rendimiento académico y las notas escolares de los alumnos, a través de un conjunto de hábitos de estudio y trabajo intelectual, utilizando todos los instrumentos y herramientas que el alumno ha adquirido durante el curso de técnicas de estudio.


 Francisco Javier Arroyo Ortega